Treinta años de oficio y diez discos en el mercado avalan a Javier Ruibal, un músico creativo y diferente a todos los de su generación. Compositor, arreglista, guitarrista y cantante, músico de frontera. Buscador de aromas, un perseguidor de la fábula y el ensueño, un explorador de la belleza. No sólo para inmensas minorías, sino para todos aquellos que valoran la calidad musical y humana. Para los que ven estremecidas sus fibras sensibles con sus maravillosas composiciones, en letra y música.